Ahora que ya estoy grande quiero recordar a mi
amor de chiquita. Tenía trece años y
estaba en Montevideo, Uruguay, vacacionando con mi abuela materna, tías y
primas. Mi mamá tenía allá una amiga de su juventud, cuyo hijo fue el motivo de
mi primer sentimiento amoroso, fuerte y persistente a través de los años, nunca
lo olvidé, ni a él ni a las sensaciones que viví a su lado. Sin haber llegado
nunca a la intimidad, compartimos
momentos inolvidables para mí y mi cabecita soñadora. Él cumplió quince, días
antes de tener que regresar yo a mi casa. Todo comenzó con una reunión
familiar, una mesa larguísima en un lugar de las afueras, un viaje sentados en
la parte de atrás de una camioneta, hombro con hombro, había refrescado y él
pasó su brazo alrededor para cubrirme del aire frío. Estaba tan emocionada que
no atiné a decir nada, ni siquiera lo miraba, pero sabía que nos embargaba el
mismo sentimiento. Solo tuvimos un rato
a solas después y nos costó despedirnos. Al otro día le pidió permiso a mi
abuela para llevarme al cine, caminamos por el puerto, llegamos a la sala, no supe
qué película se proyectaba, nuestras manos entrelazadas, las miradas furtivas y
un tierno beso que duró una eternidad. Ese recuerdo viejo, guardado en lo
recóndito de mi memoria, vuelve hoy rejuvenecido para festejar mis recién
estrenados setenta y uno, la tercera parte de mi vida.
Pero qué bonita vivencia de amor nos has compartido en esta entrada tan maravillosa y emocionante.
ResponderEliminarMuchas felicidades por tu reciente cumpleaños!! Que celebremos muchisísimos más y siempre tan estupenda como eres. Te deseo todo lo mejor.
Cariñoso abrazo!
Que maravilloso recuerdo Cristina, sin duda etos momentos bien valen la eternidad y me alegra que lo recuerdes así tan bonito.
ResponderEliminarY por supuesto felicidades por tu cumpleaños. La edad no importa cuando el corazón es joven. :)
Besitos !!
Hola eres como un libro abierto como cuentas las historias me encanta. Saludos
ResponderEliminarGracias Sara, me pusieron sentimental los setenta y uno! Pero estoy muy feliz con mi vida, en paz y armonía, un abrazo!
ResponderEliminarGracias Nieves! Por suerte tengo "bonitos retratos" para llevarme al más allá, al decir de la viejita en "Conociendo a Joe Black", un abrazo!
ResponderEliminarGracias NaNy, es muy lindo tener recuerdos enriquecedores, un abrazo!
ResponderEliminar¡Feliz Pascua de resurrección Cristina!
ResponderEliminarTrasparente como el agua, eres.
Un abrazo.¡Gracias!
Gracias Marian! Muy Buena Pascua, un abrazo!
ResponderEliminarFeliz cumpleaños y feliz Pascua de Resurrección. Te vi en el blog de Marian.
ResponderEliminarUn saludo cordial
Gracias Felicitas, un abrazo Pascual!
ResponderEliminarQue bello recuerdo, María Cristina, al fin de cuenta de pequeños retazos se compone la colcha de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Esos amores de niños y adolescentes son entrañables por los sentimientos que se despertaban... Después vivimos otros, y no niego que de igual o mayor intensidad, pero aquello perdura en la memoria de un ayer que... "¿y cómo hubiese sido la vida si...?"
ResponderEliminarAbrazos, Cristina.
Sí Rafael, son tiernos recuerdos que alegran el alma, un abrazo!
ResponderEliminarErnesto, nos volvimos a ver cuando yo tenía dieciocho y él veinte, en mí quedaba intacto el recuerdo pero no había más nada en ese presente para compartir, un abrazo!
ResponderEliminarNo hay forma de contactar contigo de forma privada?
ResponderEliminar¡Que bonito María Cristina!
ResponderEliminarSería más bonito aún que ahora os volvierais a encontrar, tu eres libre y no sabemos si él también lo es. Es un caso claro para hacer una novela.
Te felicito por tus hermosos "taiun" años y deseo que sigas cumpliendo muchos más.
Un abrazo bien fuerte.
Esas bellas sensaciones y sobresaltos del corazón, son muy dificiles de olvidar verdad?.
ResponderEliminarBesitosss
Sí Nieves, ahora paso por tu blog, un abrazo!
ResponderEliminarGracias Ma de los Angeles! Ya te veo escribiéndola! El hizo una carrera diplomática y lo último que supe fue que estaba de canciller en otro país de Latinoamérica, y esto fue hace muchos años cuando aun vivía su mamá, con quien me escribía a menudo. Son cosas que pasan, por ahí yo no fui tan importante para él, pero el recuerdo nadie me lo quita! Un abrazo!
ResponderEliminarSí Inma, son imágenes y sensaciones que nos quedan grabadas y forman parte de nuestro recordatorio, un abrazo!
ResponderEliminarQué bonito recuerdo Cristina, me ha traído a la memoria a mi primer amor platónico justo a los trece años también, lo amaba como si lo conociera, es más, duró tres años y después se convirtió en mi primer novio con dieciséis. Tiempo bello y entrañable. Un abrazo y feliz edad la tuya, especialmente por la lucidez, lo más importante.
ResponderEliminarBueno Maru, pudiste concretar tu amor adolescente, es muy hermoso, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarRecuerdos del primer amor, algo que nunca se olvida, amores de niñez que sólo regresan cuando con los años se encuentra realmente al amor verdadero. Me ha encantado Cristina. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala.
ResponderEliminarMejor que 71 son 17 al revés...
ResponderEliminarY yo veo que sigues siendo esa dulce niña tímida y llena de bondad y que bueno que así sea, pues demuestra que has valorado el verdadero amor
Bellas tus letras
Paz&Risas
Isaac
Gracias Pepe, un abrazo!
ResponderEliminarIsaac, guardar recuerdos hermosos nos alegra la vida, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarUn bello y tierno recuerdo María Cristina, pienso... ¿que habría pasado si hubieras seguido mucho más tiempo con tu abuela?. Ese primer sentimiento nunca se olvida.
ResponderEliminarBesos.
Ya lo creo Conchi, estuve todo un año llorándolo! Pero el destino era ese, un abrazo!
ResponderEliminar¡Feliz Domingo de la Misericordia!
ResponderEliminar¡Gracias Cristina!
Un abrazo.
Gracias Marian, un abrazo!
ResponderEliminarSencillamente precioso. Mil gracias por contarnos algo tan bonito y tan íntimo. Un abrazo.
ResponderEliminarMe ha encantado tu historia por lo romántica y entrañable que es.
ResponderEliminarHay momentos que se quedan grabados en el corazón para siempre, dejan una profunda huella imborrable.
Ha sido un placer visitarte y leerte hoy.
Cariños en un fuerte abrazo.
kasioles
Gracias JFBMurcia, ya pasé a conocerte y leí tu trabajo último, un abrazo!
ResponderEliminarGracias Kasioles! Esos recuerdos nos enriquecen la vida, un abrazo!
ResponderEliminarMuy lindo recuerdo. Lleno de ternura. Gracias por compartirlo. Un abrazo y felices 71 años!
ResponderEliminarGracias Gustavo, un abrazo!
ResponderEliminarQué ternura de recuerdo, qué bonita, esa ensoñación que el paso de los años no desvanece!!
ResponderEliminarBesos
¿Todavía dura la celebración? :)))
ResponderEliminarAbrazos, Cristina.
Es así Pili, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarHola Ernesto, la tercera parte me tomó medio vaga, antes publicaba cada semana, ahora por ahí pasa un mes! Pero me encanta pasar por sus blogs y leerlos, un abrazo!
ResponderEliminarMe encanta tu ternura
ResponderEliminarPaz Ilimitada
Isaac
Gracias Isaac, eso es lo que más valoro en las relaciones, la ternura, y por suerte la encuentro en mis seres queridos, un abrazo!
ResponderEliminarBesos
ResponderEliminarGracias Inma, un abrazo!
ResponderEliminarQue sea por muchisimos años mas FELIZ CUMPLE
ResponderEliminarQue tengas un año colmado de buenos momentos !!!!!
Cariños
Gracias Abuela Ciber, un abrazo!
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