INDUDABLEMENTE
ERA UN SERRUCHO CON ALMA
Y fue así
como el pobre hombre tuvo que cambiar de tarea, no pudo conseguir ningún otro
en la única ferretería de su pueblo. Buscó entonces un antiguo cuaderno con
algunas hojas aún en blanco y comenzó a escribir poemas.
Fue una bendición que se acaban los serruchos.
ResponderEliminarNos dió el poeta alas para la imaginación y empezamos a vivir con más sensibilidad.
Fuerte abrazo!!!
Gracias Sara, un pequeño paro en la desforestación, un abrazo!
EliminarBuen cambio de actividad con poco esfuerzo fisico, pero no se si mas productivo.
ResponderEliminarUn abrazo.
En lugar de ganar mucho dinero estará feliz subsistiendo con una huerta y algunas gallinas quizás, pareciera que no tiene familia para mantener, un abrazo Matías!
EliminarYa el título es por sí solo un dechado de sensibilidad e intenciones.
ResponderEliminarTu relato es la lección perfecta de cuantas cosas trascendentes se pueden decir con pocas palabras.
Brillante. Besos.
Gracias Juan, me emocionan tu visita y tus palabras, nunca me pierdo tus entradas de maravilla, un abrazo!
EliminarUn cambio radical. ¿Pero con qué harían el papel y el lápiz, con qué hacer ese material tan necesario, para su nuevo trabajo?
ResponderEliminarAbrazos, maría cristina.
Ahora hay materiales con hojas de plantas, y una birome bastará, gracias Alfred, un abrazo!
EliminarBella situación, María Cristina, pero me temo que al serrucho lo ha sustituido la motosierra, aunque, eso sí, hemos ganado un poeta.
ResponderEliminarCuanto has dicho con tan poco.
Feliz domingo.
Se consiguió un pequeño cese y quizás se convierta en un buen poeta, gracias Enrique, un abrazo!
EliminarA buen entendedor con pocas palabras bastan. El problema es que hemos cambiado las herramientas manuales por herramientas más sofisticadas y apenas sin esfuerzos, pero sí, hemos ganado un poeta y eso mereció la pena.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Mª Cristina.
Brindemos por eso, Juan, gracias, un abrazo!
EliminarMe pregunto: ¿La hoja en las que escribió? de qué material sería?
ResponderEliminarEl talado es una de las actividades más antiguas que realiza el ser humano para utilizar los recursos naturales que el medio le provee y si bien siempre la ha ejercido, no fue hasta hace relativamente poco que la misma se convirtió en una seria amenaza para el bienestar ambiental y para la continuidad de la vida humana.
Besos Cristina
Se han realizado cambios para obtener papel, Norma, el abuso en el talado es un gran problema, gracias, un abrazo!
EliminarNo sé si podrá vivir de la escritura. Un beso
ResponderEliminarSeguro encontrará algún recurso, es un hombre solo, un abrazo Susana!
EliminarTe deseo una buena semana.
ResponderEliminarGracias Judit, un abrazo!
EliminarAlma sí parece tener la autora de este texto...
ResponderEliminarY parece que es real la historia.
Abrazos Cristina.
Te imaginás si las armas decidieran no disparar más? Un abrazo Ernesto!
EliminarCosa que hizo muy bien, claro que no por eso van a dejar de talar los bonitos árboles.
ResponderEliminarUn abrazote
Solo fue un acto solitario lamentablemente, un abrazote Ma de los Angeles!
EliminarFíjate que no conocía la palabra birome. Es tanta la riqueza lingüística de tu tierra, que siempre nos enseñan al resto!!! Regresando al tema, que tan mal comenté, yendo solo por la poesía, cuánta falta hace que termine la deforestación, entre muchas otras prácticas nocivas. Es tan grande el daño que provocan y por más que lo estamos padeciendo, no paran. Es una pena. Primero entenderían las herramientas que el ser humano, tal y como lo expusiste tan genial.
ResponderEliminarBesos, feliz fin de semana.
Sara no comentaste mal, y gracias por darle el valor poético, el tema claro que es serio estamos viviendo excesos lamentables en todo orden! Un abrazote!
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