Cuando
miro hacia abajo
Veo
mi tronco ajado sucio marrón
Líneas truncadas verticales y
diagonales
Heridas de años y años plantado acá en
mi pie
Está viejo el ombú dicen al pasar
Mis hojas tiemblan de dolor
Un poco de respeto
Caramba
Aún sueño
Respiro
Doy cobijo
Al linyera
Al estudiante
A los enamorados
Ah el amor
De eso sí podría hablar un rato largo.
Que bello es el Ombu, con su historia de años y más años mirando pasar la vida y las diferentes etapas de la historia.
ResponderEliminarmariarosa
Muy hermoso poema.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias María Rosa, un abrazo!
ResponderEliminar(no recibo tus actualizaciones voy a darme una vuelta)
Un hermoso homenaje a nuestro amigo el infaltable ombú María Cristina....
ResponderEliminarno hay muchos ombú por mis latitudes. Pero lo siento. Se lo siente en cercanía a menos que con un poema tan sencillo como nítido y decidido.
ResponderEliminarAh, las plantas, las rayas, las miradas de soslayo que se permite, hermoso Ombú, echar por ver cuánto y tal la vida pasa!!!
Un abrazo fuerte, María Cristina
Gracias Lao, un abrazo!
ResponderEliminarPili, ahí tenés en tu última frase toda tu maestría para decir, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarMARIE CRIS
ResponderEliminarHermoso poema y verdadero. Valemos por lo espiritual, por nuestra oportunidad de amar, de dar cobijo, ayuda, curación o felicidad al universo, nuestra belleza, nuestro sacrificio, nuestra verdad. Eso es lo valioso, nada más, la gnete tiene que aprender a solamente a leer a través de lso sentimientos, de los gestos y de las acciones, no dejarse engañar o prejuzgar por la ilusoria imagen externa, nada más. En eso son más sabios los animales, Ven al humano en sus intenciones, en el amor que tiene para con ellos, y uno es DIOS aunque vista mal, a ellos no les interesa eso, les interesa el afecto
Gracias Magú por tu sensibilidad, un abrazo!
ResponderEliminarHiciste muy bien en reeditarlo
ResponderEliminarImportante enseñanza
Abrazos
Precioso María Cristina !!!
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Qué bueno que lo has traido que no lo conocía y me ha encantado.
ResponderEliminarMuchos besos, María Cristina.
Gracias Lapislázuli, un abrazo!
ResponderEliminarGracias Marian, un abrazo!
ResponderEliminarSí Sara, es de hace más de tres años, cuando comencé el blog, y como por lo general no me salen lindos los poemas, tenía ganas de uno y lo puse de nuevo, un abrazo!
ResponderEliminarDe alguna forma, o de muchas, somos como ese viejo y sabio Ombú...y en verdad estamos llenos de vida...
ResponderEliminarPaz y Luz
Isaac
ME ENCANTO EL POEMA. EL OMBU ES UN ARBUSTO GIGANTE Y ESTA UNIDO A LA HISTORIA DE NUESTRO PAÍS. UN ABRAZO.
ResponderEliminarROSA
Un arbol merecedor de tu homenaje. Besos
ResponderEliminarMuy buena comparación, Isaac, sobre todo los que tenemos algunos años más, un abrazo!
ResponderEliminarEso mismo Rosa, es otro símbolo patrio más, un abrazo!
ResponderEliminarGracias Gardenia, un abrazo!
ResponderEliminarFRENTE A MI CASA DE LA INFANCIA HABÍA UN OMBÚ . ALGÚN DÍA VOY A ESCRIBIR SOBRE EL Y TE LO VOY A DEDICAR
ResponderEliminarGracias Lao, lo espero con alegría, un abrazo!
ResponderEliminarMuy bonito poema, muy sentido y con mucha nostalgia.
ResponderEliminarun abrazo Maria Cristina.
Gracias Pluma! Un abrazo
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