Esta
curiosa definición es el resultado de mi experiencia personal. Desde hace
bastante tiempo disfruto de una paz que me llevó bastante trabajo obtener. Como
resultado tengo unos seis kg de más, alegremente conseguidos sin ningún
esfuerzo de mi parte. Ya hace algunos años, un sacerdote argentino muy
particular había definido a la paz como un egoísmo más que como un logro.
Decía que ese estado nos lleva a una beatitud muy cómoda
pero que nos desconecta del entorno agitado con el cual debiéramos estar en
sintonía. Por supuesto que no se refería a la paz entre los pueblos, sino a esa
otra sensación personal y placentera. Así que desde mañana lunes me propongo
iniciar una etapa de stress acelerado a bordo de unas buenas zapatillas y unas
cuantas cuadras para recorrer, además de cerrar un poco la boquita ante
manjares tentadores. Perder un poco de paz me liberará de esos kilitos
molestos.
Ja ja ja...La Paz y el buen humos, van en sintonía....Muy bueno .
ResponderEliminarUn abrazo.
Quise decir buen humor
ResponderEliminarÉsta muy bueno tu análisis y el del cura, pero según como se entienda el concepto. Es cierto, si no se es capaz de tener Paz en medio de la Guerra, es porque no es auténtica. Lo otro, lo de engordar, se genera por la ansiedad que produce el sedentarismo al sentir que estamos demasiado "quietos", desde luego que ésto no es paz verdadera.... Saludos María Cristina....
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ResponderEliminarOjo con los kilos que después son difíciles de quitar. Llegan solos y sin que nos demos cuenta, pero para irse nos cuesta bastante.
Rosa
Ahora lo entiendo todo...
ResponderEliminarA mi también me venían sobrando unos kilitos pero era tal la tranquilidad (esactamente como la que hablas ) que ni me importaba tenerlos.
Hace ya unas semanas me puse manos a la obra, y como harás vos, he cerrado la boquita para los manjares así que ya adelagasé algunos kilitos, pero claro... al subir a la bascula me he dado cuenta que mi tranquilidad ha tenido que ser desbordante :)
En fin, ánimo y adelante Cris !!!
Gracias Armando, un abrazo!
ResponderEliminarEs que estaba tan cómoda en la quietud, Lao, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarSí Rosa, fue muy cómica una intención de calzarme un vestido que hasta hace poco me bailaba y tener que hacer fuerza para ponérmelo, un abrazo!
ResponderEliminarja ja ja Nieves, está bien, ya empezaste, hoy me toca a mí! Un abrazo solidario!
ResponderEliminarHola, Cristina.
ResponderEliminarPara hacer unas risas está tu comentario... Y ya veo que todos se han apuntado a ello, incluido yo.
No sé lo que quiso señalar el argentino con sus palabras, pero definir que la paz engorda, aunque sea la personal y placentera, parece algo original...
Lo que suele suceder es que la “inactividad” o falta de ejercicio que cierto estado de relax produce, puede que fomente esos quilos no deseados. De la misma manera que también puede que relaje los músculos.
Cierto también que la “boquita” hace mucho en eso de las tallas.
La solución son esas zapatillas y su uso continuado. Ya nos contarás.
Un abrazo.
Jajajaja, ¡me encanta!! Acompañémonos a ejercitarnos y motivémonos para negarnos un poco a los antojos... tan rico que es comer y tan afortunados quienes podemos hacerlo. Qué paz ni qué stress.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo mi cariño un poco gordito, jajaja.
Tal cual, Ernesto, todo en su medida y armoniosamente parece pegar con esto, un abrazo!
ResponderEliminarSara, también pensé en un poco de zucundum! al compás de la música, puede que ambas cosas me ayuden mejor y además me permita abrir la boquita a alguna cosa rica ja ja ja, un abrazo bien gordito!
ResponderEliminarHola paso de visita me encanta tu escrito lo que engorda es estar bien y con muy buen humor. Saludos
ResponderEliminarJjjajajaja, bueno, a gastar zapatillas se ha dicho Cris!! Te acompañaría pero estoy vagaaaaa. Y si que tengo kilos de más, ya ves que los años son malos, cada vez me cuesta más salir y dejar de comer. Menos mal que me gusta bailar si no ya andaría rodando!! Un abrazote linda y te me cuidas.
ResponderEliminarNaNy, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarBien Lyliam, voy a imitarte, dicen que aunque uno tenga unos kilitos de más el baile te da buena forma, a mover el esqueleto! Un abrazo
ResponderEliminarMARIE CRIS
ResponderEliminarQué genial
si, yo estoy demasiado pacífica ultimamente y dulce (mi paz me hizo subir casi diez kilos, pero no estoy caminando prque tengo unos dolores demasiado fuertes en la cintura y las piernas tendré que ir al clínico para que me derive). En la INDIA las mujeres ya d emás de cincuenta son gorditas y pacíficas y muy felices, las indias también, quizás lo sano es estar gordita y contenta, más apaciguada y no corriendo, yo noto que cuando uno está más gordito le cuesta moverse pero tambíen pelearse, no sé si quiero bajar muchos kilos, me gusta la paz, y sobre el sacerdote no entendí. Creo qeu la paz uno la busca dentro del propio corazón, como la claridad del alma, como a DIOS, con el rezo y la meditación y para eso logicamente debe apartarse de la tele, y del vecindario, como JESÚS en el desierto, si él necestiaba estar solo, si los monjes trapenses necesitan su soledad, aislamiento y su silencio, mucho más nosotros, laicos simples. Para luego volver recargados y ayudar al prójimo pero a través de lo que nos dicta nuestro corazón y no por el qu+e dirán o por la presión que nos quiera infundar el mismo necesitado (al estar en silencio y soledad en paz con nosotros mismos, luego, hasta sabemos a quein tenemos que ayudar y cómo, nos ponemos selectivos en función de nuestar misión, y eso es optimo espiritualmente, bueno nena beso
marie cris
ResponderEliminarjustito te dejo el link http://mertonpito.blogspot.com.ar/2015/04/donde-buscamos-lo-que-somos.html (es el post de ayer o de hace unos pocos días de mediados de abril 2015)
Magú el sacerdote era Luis Mujica, y hablaba de mantenerse siempre alerta para estar conectado, que a veces la paz interior es demasiado solitaria, a eso se refería, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarCaminar...
ResponderEliminarCaminar...
Caminar...
Paz...
Paz...
Paz...
Un matrimonio feliz.
Un Abrazo.
Gracias.
Buena definición Olga y Charle, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarDicen que todo lo bueno engorda, ajaja
ResponderEliminarExitos con la nueva vida
Abrazo
Sí Lapislázuli, para redondear, todo lo bueno es pecado engorda o te hace mal, en fin, paciencia, ya volveremos a la normalidad y me podré poner la ropita sin esfuerzos, un abrazo!
ResponderEliminar¡jaja! Cómo me has hecho reír, ni te lo imaginas.
ResponderEliminarYo siempre he estado muy hermosa en kilos, no en otra cosa, pero esa paz cuesta de tener si no estamos en equilibrio con lo que sucede a nuestro alrededor. hay mucho sufrimiento en este mundo, eso nos produce dolor y más si tenemos las manos atadas sin poder hacer poco o nada, pero a pesar de ello, mantenemos una cierta paz de espíritu porque Dios nos conforta.
Gracias
Un gran abrazo.
Sor. Cecilia
Gracias Sor Cecilia, qué alegría recibir tu visita! La paz conseguida con esfuerzo es por superar todo eso más las situaciones personales, por supuesto, y en realidad no la pienso abandonar porque mientras la sostengo estoy muy bien conmigo y con los que me rodean, gracias, un abrazo!
ResponderEliminarJajaja...Nunca tendremos paz completa mientras estemos en este mundo, donde sufren muchos hermanos nuestros.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte.¡¡GRACIAS !!
Un mundo ideal, Marian, donde haya paz completa, un abrazo!
ResponderEliminarEsa Paz interior hace, a veces, que el volumen de grasas proliferen y nos pongamos más rebosantes de "Michelines".
ResponderEliminarEn cualquier caso; mente y cuerpo se asocian para estar joviales de energía desbordante.
Bueno... si se acumulan Kilos, también se pueden reducir, como tu bien dices, con unas buenas zapatillas, unas cuadras por recorrer y una voluntad a prueba de "bombas".
Abrazos y Besines.
Tal cual, Pedro, todavía mis buenos propósitos están demorados por diferentes motivos, pero tengo ya la decisión de empezar con todo, y que no sea lunes! Ese día no sirve ja ja ja, un abrazo!
ResponderEliminarEXCELENTE IDEA. TE LA COPIARE, NADA MEJOR QUE UNA BUENA CAMINATA REPIRANDO EL AIRE PURO Y DISFRUTANDO DE LA VIDA. TEDEJO UN ABRAZO INMENSO.
ResponderEliminarHola Maria Cristina, desde el blog de Sara, he pasado al tuyo y lo que he leído me resulta muy ameno, así que si no te importa me quedo en el y te invito a que pases por el mío cuando gustes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Seguro que no María Cristina. Yo también tengo esos "kilitos" de más y no hay modo de quitármelos. Claro que yo también gozo de esa paz que tanto daño nos hace, pero ¿Sabes una cosa?...Ni voy a caminar, ni voy a dejar de tomarme ese rico bollito a la hora del te, ni...bueno mejor que no siga.
ResponderEliminarLos mayores tenemos la paz y tranquilidad que llegan con los años de la jubilación (no lo digo por ti), yo ya he conseguido, sin querer, echarme unos kilos de más, pero no me importa...tengo mucha PAZ.
Un abrazote guapa
Rayen, a caminar entonces! Un abrazote!
ResponderEliminarHola Conchi, gracias por venir, ahora voy a conocerte también, un abrazo!
ResponderEliminarja ja ja Ma de los Angeles, está muy bien, cada uno tiene su gusto para su propia vida, vos sos más coqueta con tu arreglo personal, un abrazo! Ah, no pienso renunciar a comer algo rico, solo que un poco menos!
ResponderEliminarEs cierto maría Cristina, dicen que la felicidad engorda, pero todo sea por mantener siempre una buena sonrisa ¿no? Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
ResponderEliminarMuy bien Pepe, no quiero ser una flaca amargada ja ja ja, un abrazo!
ResponderEliminarMaría Cristina...¿ Como van esas zapatillas? Se han desgastado las suelas ? Ya nos contaras.
ResponderEliminar¡Feliz Domingo guapa ! Un abrazo grande. Dios te bendiga.
jajajajjaja. Pero creo que eres bendita en esa paz, la interior, que al final es la única que cuenta...
ResponderEliminarPaz y más paz aunque engorde
Isaac
No Marian! Los buenos propósitos están demorados y no es buen día el lunes para empezar, un abrazo!
ResponderEliminarGracias Isaac, un abrazo!
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