Escuela primaria, no recuerdo el grado, geometría, cuerpos en cartulina,
cuadrado, dentro de todo sencillo, pirámide, un pegote interminable y repetido,
no lograba que la punta quedara prolija y vuelta a empezar, pliego de cartulina
agotado. Presentación, cara de podría haber quedado mejor de la maestra, bueno,
un 7. ¡Alivio! Ahora llegamos a los secretos. Escuela primaria de mi hija
mayor, cuerpos en cartulina, llegamos a la pirámide, yo haciendo gala de
experiencia, la hago. Misma historia, nota más baja, otros tiempos. Escuela
primaria de mi hijo del medio, otra vez cuerpos en cartulina, con mi vasta
producción podría haber quedado mejor. Mi hijo menor se salvó de toda esta
parafernalia, nunca le pidieron nada de eso. No tuve que alardear de mis fracasos.
Menuda história previa como para triunfar. ;)
ResponderEliminarAbrazo.
EliminarTodo triunfo tiene su raiz en el fracaso jajaja, un abrazo Alfred!
Yo nunca pude hacer bien las figuras. Un beso
ResponderEliminarNos parecemos Susana! Un abrazo!
EliminarYo lo solucioné. Les hacía fabricar pirámides con hoja cuadriculada. De este modo las fallas en el armado eran menos.
ResponderEliminarBesos Cristina
Muy bien Norma, hay que comprender a las víctimas! Un abrazo!
Eliminarjajaja qué buena res compañera!!!!!!
ResponderEliminarUna triunfadora jajaja! Un abrazote Tracy!
EliminarUy a mi me paso algo similar de niña. Te mando un beso.
ResponderEliminarY mi tía era en mi infancia la encargada de las labores, con ella tenía 10! Un abrazo Judit!
EliminarJajaja, te salvaron los cambios de programas de enseñanza.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
No pude lucirme más jajaja, un abrazote Sara!
EliminarPodría no haber tal "fracaso". Dado que la construcción de las pirámides en Egipto no se consiguieron de un día para otro ni haciendo brindis al sol... :))))))
ResponderEliminarLo dejaremos en deberes de aquellos años, buena voluntad, y...
No meterse en los "charcos" de la juventud.
Abrazos Cristina.
No es cierto, Ernesto? Lo vamos a dejar así, un abrazo!
EliminarMaría Cristina, tu relato me ha sacado una sonrisa y me ha traído recuerdos de batallas similares con la cartulina y el pegamento. Es curioso cómo esos pequeños desafíos escolares se convierten en anécdotas familiares que se transmiten de generación en generación. Al final, más allá de las notas, quedan las historias y la complicidad de los intentos.
ResponderEliminar¡Gracias por compartirlo con tanta calidez y humor!
Gracias Enrique, nuestras pequeñas torturas infantiles luego son anécdotas, es verdad, un abrazo grande!
EliminarUna virtud más que añadirte de todas las que observo: Te gusta contestar todos los comentarios. Eso demuestra tu compromiso.
EliminarFeliz noche.
Para mí es muy especial la compañía de todos ustedes, gracias Enrique, un abrazo!
EliminarHola Maria Cristina, si que mi has hecho sonreír. y recordar. No soy muy hábil en esos quehaceres por lo que me identifico plenamente!
ResponderEliminarAbrazos
Aunque no lo creas sigo insistiendo con habilidades nulas en otras tareas, un abrazo Cecilia!
Eliminarjajajajajaja, has escrito algo muy bueno y me encanta tu sentido del humor
ResponderEliminarPaz
Isaac
Gracias, Isaac, me alegra hacerte reir, un abrazo!
EliminarHola Mª Cristina! Voltei...
ResponderEliminarLeerte es siempre una dulce fascinación...
Un abrazo!
Hola Albino, no tengo nuevas entradas tuyas, es que estás haciendo reposo literario? jajaja, gracias, un abrazo!
EliminarHola Mª Cristina, gracias por tus palabras.
EliminarSe pasa que tube un acidente e fraturei a mão direita, o que me impediu de escrever. Felizmente estou recuperado!
Te dejo un fuerte abrazo.
Buen fin de semana.
AH! Qué pena! Justo fui a tu espacio y ya publicaste, espero que estés recuperado, un abrazo!
EliminarYO DONDE ERA MALA ERA EN DIBUJO, JAMAS PUDE HACER NADA BIEN...¡QUE BUEN SENTIDO DEL HUMOR TIENES!
ResponderEliminarUN ABRAZO EN LA DISTANCIA...
Ah! Dibujando siempre pude hacerlo bastante bien, ahí también ayudaba a mis hijos y sacaban buenas notas para compensar, pero manualidades aplazada! Un abrazote Ma de los Angeles!
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